La muerte del general Franco supuso el inicio de una época de mayor libertad para nuestra sociedad. En este contexto de apertura y modernidad apareció la figura de Josep Valls i Puigvert que, después de unos años cercando por Europa, devuelve en Lloret de Mar.
En nuestra población impulsó la apertura de una red de locales y casas de huéspedes, que eran respetuosas y abiertas en la comunidad LGTBIQ.
Así, Josep Valls se convirtió en un empresario pionero, y supo gestionar durante más de treinta años locales como La Tortuga, el Bar David, El Incognito y Bubú, que fueron lugares emblemáticos y referentes por el colectivo homosexual.
La Tortuga Roja, en la calle Santa Teresa, abrió las puertas en 1978, con una decoración rústica que simulaba una bodega. Estas decoraciones de carácter tradicional estaban de moda en la década de los años sesenta y servían para atraer a los turistas europeos.
Para simplificar el nombre del establecimiento, se lo denominaba La Tortuga. Esta denominación hacía referencia al nombre de la barca que tenían sus tíos, los hermanos Puigvert y Burgada, que eran conocidos como los Morets (hijos de hace falta Moro).
Al poco de inaugurarse el local, se organizó una fiesta homenajeo a en Fernandito, que durante tantos años había regentado el Bar Martin’s, ubicado en la calle Santa Cristina.
En Fernandito imitó, perfectamente caracterizado, a la popular Sara Montiel. En Demetrio (a) Deme, camarero de La Tortuga, interpretó la conocida canción Agradecida y emocionada de Lina Morgan.
Entre otros invitados en la fiesta había: la Señora, la Lenta, la Marilú, la Manoli, la Azulete, la Mona, la Prima… integrantes de la gran familia de La Tortuga.
El año 1979, con la ayuda de su socio y amigo José Rincón, se actualizó la decoración del local, que cogió un aire más kitsch.
En aquel momento, La Tortuga era el único bar de ambiente desde Barcelona hasta la frontera, de forma que atrajo clientela nacional y extranjera, y se convirtió en uno de los locales más concurridos de la zona.